Joseph Pulitzer
En un día como hoy en, 1847, nació el periodista estadounidense Joseph Pulitzer, cuyo nombre acabó inspirando el premio de periodismo más prestigioso del mundo.
Los Premios Pulitzer son galardones por logros en el periodismo impreso y en línea, la literatura y la composición musical en los Estados Unidos de América. Fueron establecidos en 1917 según las disposiciones del testamento del editor estadounidense de origen judío y húngaro Joseph Pulitzer.
Los premios se otorgan cada año en veintidós categorías, incluyendo en ciertas ocasiones un reconocimiento especial adicional. En veinte de ellas, los ganadores reciben un certificado y 10 000 dólares en efectivo, mientras que el ganador en la categoría de servicio público del concurso de periodismo obtiene una medalla de oro.
Ahora todo el mundo conoce los famosos premios Pulitzer. Sin embargo poca gente conoce el personaje que hay detrás de ese apellido húngaro que cambió el mundo del periodismo.
El joven Joseph Pulitzer, emigró a Estados Unidos con tan sólo 17 años y sin saber ni una palabra de inglés. El pasaje se lo pagaron unos reclutadores norteamericanos que buscaban soldados para luchar en la guerra de Secesión. Al terminar la contienda, y para sobrevivir, Pulitzer desempeñó multitud de oficios, y acabó viajando como polizón a Saint Louis (Missouri), donde trabajó durante un tiempo como mesonero y aprendió inglés por su cuenta.
Pulitzer fue víctima de una estafa cuando respondió a un falso anuncio de empleo en el que se solicitaban jornaleros. Un periodista que trabajaba para el Westiche Post, un periódico publicado en alemán, descubrió el engaño y le pidió que escribiera una crónica relatando su experiencia. Y así lo hizo. Pulitzer contó como él y el resto de personas contratadas fueron abandonadas a 60 kilómetros de Saint Louis, y tuvieron que volver andando durante tres días y sin los cinco dólares de depósito que les habían pedido como fianza.
El director del periódico quedó impresionado con el articulo e inmediatamente lo contrató. Cuatro años después, Pulitzer dejó el periódico para estudiar derecho y ejercer como corresponsal para el New York Sun. Años más tarde, pudo comprar el Saint Louis Evening Post y el Evening Post, que refundó como el Post Dispatch. Pero sus ambiciones periodísticas no terminaron ahí. En 1887, adquirió el New York World, que se hizo famoso gracias a sus artículos sensacionalistas. Debido al éxito, lanzó una edición vespertina: The Evening World. Las dos ediciones incluyeron como novedad la publicación de tiras cómicas; la primera fue una tira titulada El chico amarillo, creada por el dibujante Richard F. Outcault.